La investigadora Jennifer Hincapie señaló que la clonación de un mono en China, no es motivo de preocupación, pero llamó a no rebasar los límites de la experimentación con animales
La clonación de humanos es una posibilidad lejana y por el momento está cancelada, pues para ello existen los comités de ética encargados de vigilar el cumplimiento de las regulaciones y normas internacionales, señaló la directora del Programa Universitario de Bioética de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Jennifer Hincapie Sanchez.
Recordó que en la Declaración Universal sobre el genoma y los derechos humanos, se prohíbe expresamente esta práctica con embriones de nuestra especie y mantiene una visión antropocéntrica en donde sólo se piensa en la gente y se dejan desprotegidos a otros seres vivos.
“Estamos en un punto de la vida en donde ya no valdría solamente pensar en el bienestar de los seres humanos, sino también en el del ecosistema y de las otras especies. Ese documento tendría que revisarse y reconsiderarse para vigilar también las garantías de animales y plantas”, explicó.
La opinión de la investigadora surgió luego de que científicos del Instituto de Genética y Biología del Desarrollo de la Academia de Ciencias de China informaron sobre la clonación de un mono en julio de 2020.
De acuerdo con información de la revista científica especializada Nature Communications, y que recuperó un comunicado de la UNAM, el simio rhesus, bautizado como Retro tiene actualmente tres años de edad y se mantiene en buen estado físico.
“Es la primera vez que un ejemplar de esta especie logrado con este método sobrevive hasta alcanzar la edad adulta; los científicos consideran que el procedimiento se puede declarar una clonación exitosa”, señaló la publicación.
El objetivo principal de la clonación de primates, agregó, es utilizarlos para estudiar enfermedades humanas, como la depresión y la ansiedad, además de probar una serie de medicamentos para atender padecimientos crónicos e incurables.
Hincapie Sanchez destacó que este tipo de investigaciones están pensadas para mejorar la calidad de vida de las personas, pero es necesario estar atentos a que los experimentos no traspasen la línea hacia la gente, además de procurar que no haya tanto sufrimiento animal en la experimentación y desarrollo de los estudios biomédicos.
“La particularidad que tienen los primates clonados es que fisiológicamente tienen muchas similitudes con la fisiología del ser humano, pero el hecho de que sean similares no quiere decir que sean idénticos y entonces el proceso de investigación biomédica que se está llevando a cabo, no necesariamente tiene que transitar hacia la experimentación con seres humanos”, acotó.
Asimismo reiteró que la clonación exitosa por parte de científicos chinos no debe ser motivo de preocupación ni de escándalo, pues esa práctica con seres humanos es lejana, además de que su prohibición fue adoptada por Naciones Unidas en 1997.