El Instituto para el Envejecimiento Digno se enfoca en el bienestar físico y social de los adultos mayores en la CDMX, donde residen un millón 200 mil personas de este grupo etario.

La Secretaría de Desarrollo Social (SIBISO) de la capital del país, a través del Instituto para el Envejecimiento Digno (INED), se convirtió en un ente de atención social y de salud de este sector de la población, luego de que en 2019 el programa de Pensión para Adultos Mayores en la Ciudad de México fue federalizado. Según sus registros, en la ciudad residen un millón 200 mil personas mayores de 60 años, de las cuales 860 mil están identificadas y forman parte del Instituto para el Envejecimiento Digno. 

De acuerdo con Guillermo Cruz Rojas, Coordinador de Atención Social y Comunitaria, la demarcación con más adultos mayores es Iztapalapa, seguida de Gustavo A. Madero. El instituto cuenta con un padrón de personas mayores residentes de la Ciudad de México; dependiendo del número de habitantes de la tercera edad identificadas en cada una de las 16 alcaldías, se despliega un equipo de empleadas del gobierno dedicadas a realizar visitas domiciliarias.

EL MODELO DE ATENCIÓN INTEGRAL PARA EL ADULTO MAYOR ATIENDE A 860 MIL PERSONAS REGISTRADAS EN LAS ALCALDÍAS.

RECORRIDOS CASA POR CASA

Estos recorridos casa por casa, tienen la finalidad de conocer, verificar y estar al pendiente del estado social, familiar y de salud en que se encuentran las personas mayores residentes de la capital. Estas se ejecutan a través de mil 200 profesionales en servicios a adultos mayores. De las visitas se derivan todas las solicitudes posibles, para atención médica; en caso de que el adulto mayor no cuente con un servicio de salud, el instituto cuenta con 32 médicos y un equipo de entre 10 y 15 gerontólogos.

El INED también tiene disponible un equipo que atiende los posibles casos de violencia y/o omisión de cuidados que pueda estar sufriendo una persona. Todas las necesidades y quejas de las personas se identifican y posteriormente se canalizan a las áreas del instituto, de esta manera se da atención y seguimiento puntual a cada uno de los casos.

RECREACIÓN PARA TODOS

El INED cuenta con una oferta turística a través de “Colibrí viajero”, que realiza tours en la ciudad de manera gratuita; mediante algunas operadoras turísticas que trabajan con el instituto, también hacen viajes al interior del país cada cuatro meses. Además, parte de los servicios que ofrece el instituto se encuentran los Círculos de Aprendizaje, Socialización y Saberes (CASSA), en el que grupos de personas mayores de una comunidad en específico, se juntan para realizar actividades lúdicas, recreativas, actividad física y para realizar viajes y manualidades. 

Hasta lo que va de este año, hay 400 “Círculos de Aprendizaje” en la Ciudad de México y cada uno de los espacios es guiado por una profesional del instituto. En los CASSA también se ofertan los servicios del INED, y por la cercanía con las personas, es posible detectar alguna situación social o de salud. “La finalidad principal de estos círculos es brindar a las personas mayores una alternativa de respiro de su cotidianidad, y un lugar con similares pueda desarrollar alguna actividad que les guste, que tenga en común el grupo de personas”, dice Cruz Rojas. 

“Hay grupos que ya escalaron a niveles donde las personas ya formaron un grupo musical, un grupo de baile o de danza folclórica. Hay grupos que ya han compartido experiencias en foros y en conferencias. Con orgullo lo digo: todos estos grupos los tenemos en el instituto”. Quienes estén interesados en formar parte, sólo deben cumplir con tener de 60 años en adelante y ser residentes de la ciudad. 

ERRADICAR LA VIOLENCIA 

El INED tiene consejos locales para erradicar la violencia y el maltrato en personas mayores, los cuales se estipulan en la Ley de reconocimiento de los derechos humanos de las personas mayores. Para una mejor atención, hay un consejo en cada alcaldía conformado por un jefe de Unidad Departamental, que tiene la función de representar al instituto en las demarcaciones. 

El objetivo es que todos los casos de violencia se identifiquen, se atiendan y, si se logran resolver con visitas, se dé por cerrado el caso. Cuando se trata de situaciones delicadas y/o complicadas se llevan a un consejo donde participan otras instancias de gobierno como la fiscalía, Derechos Humanos, el Consejo Ciudadano y la alcaldía. Cada una de las instancias participa desde sus facultades contribuyendo a la resolución del caso, según sea necesario, mediante una atención interinstitucional para resolver los casos delicados. 

El instituto también tiene un padrón para identificar a las personas adultas mayores. Cada cierto tiempo se realiza una actualización en el registro con la intención de integrar a nuevas personas mayores de 60 años a la base de datos.

Texto por Miriam Jiménez. Fotografía: Shutterstock