Marco Islas-Espinosa.- ¿Cómo reparar los mercados si ni siquiera los locatarios cumplen con sus obligaciones? En el Ayuntamiento de Guadalajara se enfrentan con este dilema para el sostenimiento y rehabilitación de los mercados municipales.
Por un lado, tienen que cobrar los derechos e impuestos que supone el tener un local en cualquiera de los 92 mercados municipales. Y por el otro, deben bajar recursos de bolsas federales para el mismo objetivo.
El problema que enfrentan es que en ninguno de los dos casos pueden ser totalmente efectivos.
El cobro no es el adecuado porque, de acuerdo con un informe que obtuvo este medio de comunicación, un total de tres mil 706 locatarios adeudan 23 millones de pesos a la comuna tapatía por la “concesión” que les hace el ayuntamiento para que exploten un espacio comercial.
Y por el otro lado, los recortes presupuestales anunciados por la Secretaría de Hacienda, ocasionaron que hasta el mes de septiembre se pudieran aprobar 77 millones de pesos para la rehabilitación de 10 mercados municipales. Es decir, las obras anunciadas desde principios de año, siguen sin comenzar.
Las deudas
La Tesorería Municipal informó, mediante un archivo enviado a Máspormás vía ley de transparencia, que el mercado Libertad (San Juan de Dios) es el que más locatarios morosos tiene, con mil 049 registrados.
Es decir, uno de cada tres locatarios en San Juan de Dios no cumple con sus obligaciones. El monto global de los pasivos de este mercado supera los cuatro millones 787 mil pesos.
En Plaza Guadalajara, uno de los últimos mercados municipales que construyó la comuna tapatía (2007) y que paradójicamente se ubica frente al edificio de Presidencia, registra la cantidad de 170 locatarios que presentan adeudos con el Ayuntamiento.
Eso quiere decir que más de la mitad de los locales que tiene la plaza que se construyó específicamente para reubicar a los comerciantes informales, no pagan sus “impuestos” El monto global del adeudo es un millón 135 mil pesos.
También los locatarios del Mercado de Abastos tienen pasivos importantes. Son 123 locatarios que en su conjunto adeudan tres millones 206 mil pesos.
En el informe señala que 87 de los 92 mercados municipales tienen por lo menos un locatario moroso. Sin embargo no se cuenta con el desglose de los mercados Pedro Ogazón y el Mercado Corona, los dos mercados que fueron demolidos y reconstruidos en la pasada administración. En este caso, se informa que la tesorería todavía no tiene los padrones completos.
Sólo 10 rehabilitados
Más de seis meses de retraso fue el tiempo que tardó el Ayuntamiento de Guadalajara en bajar 77 millones de pesos para la rehabilitación de 10 de los 92 mercados municipales.
Los mercados que se intervendrán en los próximos días son: Ignacio Aldama, Felipe Ángeles, Independencia, Pedro Vélez, San Jacinto, Belisario Domínguez, Ponciano Arriaga, Álvaro Obregón, Ayuntamiento y Javier Mina.
Los montos de las rehabilitaciones van de los tres millones 872 mil pesos para el mercado Álvaro Obregón hasta los 16 millones de pesos para el Ignacio Aldama.
En la sesión extraordinaria del Ayuntamiento tapatío de este lunes, el primer edil Enrique Alfaro Ramírez, presumió como un logro la obtención de recursos de la Federación en un año de recortes presupuestales.
“Hay algunos municipios que no han recibido un peso de estos recursos federales. La gestión que se logró es muy valiosa para la ciudad porque se trata de proyectos importantes. Esperamos en los próximos días poder lograr otros 300 millones de pesos más para obras de pavimentación”.
Mercados, un pendiente
Primero fue el Pedro Ogazón, en la colonia Morelos. Le siguió el Agustín de la Rosa en la colonia del Fresno. Y el más espectacular fue, sin duda, el mercado Corona. Los tres edificios tuvieron que sufrir una reparación o reconstrucción porque sus cimientos ya no aguantaban el abandono.
En julio pasado, este medio publicó el reportaje “Mercados, ¿para qué?”, donde se mostraba la tesis de que los mercados municipales son un epicentro social relevante para un barrio o una comunidad.
“Desde que Guadalajara se asentó definitivamente en el Valle de Atemajac los mercados locales han funcionado como centro social de las comunidades. San Juan de Dios es mucho más que un mercado. Desde los orígenes de Guadalajara se convirtió en uno de los corazones donde palpita la ciudad y por donde transitan más de diez mil personas cada día”, escribe Juan Carlos Núñez Bustillos en el Triviario Tapatío (Tedium Vitae Editorial, 2014)”.
En el texto se señaló que para la Organización de las Naciones Unidas para la alimentación (FAO) los mercados cumplen una función vital para el futuro de la humanidad al ser parte importante para modificar la relación entre productores, comerciantes y consumidores.
Ahora el destino de los mercados municipales vive una encrucijada: muchos de sus locatarios no pagan sus obligaciones y el Ayuntamiento tapatío ni cobra adecuadamente ni baja los recursos federales a tiempo.